sábado, 31 de octubre de 2015

Paradisus La Perla en México


Si estáis esperando un post sobre la comida sin gluten en Rivera Maya siento deciros que no será éste ;) Ya que los nervios que habíamos hecho antes de la boda y las interminables caminatas por Nueva York hicieron que llegáramos al hotel con ganas de descansar. 
Y así fue, descansamos y comimos, sólo hicimos eso. La única pega que la naturaleza lleva su curso y fue imposible bañarnos en la playa ya que estaba llena de algas, pero bueno en la piscina del hotel tampoco se estaba nada mal.


Cuando vas a un hotel con todo incluido en un destino donde la opción ir a comprarte algo al supermercado no es factible tienes miedo de pasarte todas vacaciones a base de carne a la plancha y fruta. Así que cuando nos pusimos a buscar el plan B, Yolanda, la persona que nos atendió en la agencia de viajes, nos aconsejó Paradisus La Perla, de la cadena Meliá y fue una gran recomendación!

El complejo tiene varios restaurantes repartidos por sus instalaciones, así que para no marearos lo he separado por comidas. Tanto el desayuno como la comida eran estilo buffet, así que el primer día vino el capitán de la cocina, Gilberto, y se sentó conmigo para explicarme con detalle todo lo que tenían y me sacó un montón de opciones para que eligiera. Tengo que agradecer de corazón a Gilberto toda su atención y profesionalidad, me trató como una reina. Y puestos a agradecer también haré una mención especial a Uriel, un camarero que también se portó muy bien con nosotros. Gracias a ellos no tuve ningún problema con la comida.

Comenzaré con una de las comidas más importantes del día, el desayuno.

Para desayunar tenemos muchas opciones, tanto dulces como saladas. El pan que ponían no lo había probado, era de molde, lo cortaban ellos con el grosor que tú quisieras y estaba muy bueno.

 

Y el plato de dulces llevaba cookies, cupcake y un bizcocho de chocolate, todo ello delicioso, de verdad que estaba buenísimo.


Para comer me dijo un día Gilberto en el desayuno que probase la pasta que estaba muy buena, que llamase media hora antes de ir que la tendría hecha para cuando yo llegase. Me la prepararon con tomate natural.


Y de postre me sacó un plato con varios dulces para que los probase.
Ya os he dicho que me trató como una auténtica reina.



En la piscina había un bar con todo tipo de bebidas y varias opciones para comer.
Aquí teníamos una ensalada y pescado a la plancha, pero parece que si la gente que tienes alrededor se está comiendo una superhamburguesa con patatas pues como que a ti no te apetece algo de "dieta", entre muchas razones porque estás de vacaciones y quieres comer de todo menos una ensalada... jajaja o al menos eso es lo que me pasa a mí.
Así que como el primer día me dijeron que preguntase siempre sí había más opciones, ya que algunos platos se pueden adaptar, le pregunté al camarero que nos atendía siempre en la piscina (qué pena me da no acordarme de su nombre) y le consultó a los cocinero si los nachos eran aptos o si cabía la posibilidad de adaptarlos. Y la respuesta fue que sí!!! Así que mientras que Mr GF se comía su hamburguesa yo saboreaba unos nachos con guacamole.

 

Ahora os hablo de los diferentes restaurantes para cenar.

Cada restaurante está especializado en un estilo de comida y en sus cartas detallan qué platos son libres de gluten para que resulte más fácil.
El restaurante Fuego es uno de ellos, este restaurante en el que podéis encontrar comida latinoamericana.

 
 

Bana fue el que más me impresionó, bueno y me encantó ;)

Un show cooking de comida japonesa.

  

En la cena estábamos un matrimonio y nosotros dos y el camarero les explicó con detalle en qué consistía la enfermedad celíaca y el porqué me tenía que servir a mí primero. Cosa que agradecí enormemente, ya que primero demostraba que él conocía a la perfección la enfermedad celíaca y quiso evitar algún posible mal entendido. El matrimonio se interesó sobre todo lo relacionado a la enfermedad celíaca y como bien sabréis se convirtió en el tema de conversación durante la cena jaja

  

Como el primer plato no era apto, ya que consistía en rollitos de primavera y varios platos más que llevaban gluten, se tomaron las molestias de traerme del otro restaurante un plato con sushi y un bote de soja sin gluten para que me echará donde quisiera. 
Como todos sabemos encontrar soja sin gluten no es tarear fácil, me encantó ver como se acordaban de nosotros hasta en esas pequeñas cosas.


Y como bien les explicó el chef al resto de comensales, me sirvieron la primera para evitar la contaminación cruzada en la plancha y que de ese modo poder cocinar al resto con salsas que no eran aptas para nosotros.
Estaba todo buenísimo, tanto Mr GF como yo recordamos esa cena como la más impresionante. La comida estaba deliciosa, el cariño con el que trato el tema sin gluten fue admirable, pero lo que más nos impresionó fue ¡el show! Nos quedamos tan alucinados que se nos olvidó grabarlo. 

  

Otra de las opciones es el restaurante Viento.

  
Un mediterráneo oriental (Turquía, Marruecos, Grecia y Líbano) que os fascinará.

  

Y para terminar os mostraré uno al que tenéis que ir sí o sí. Mole es un restaurante con sabor mexicano. 
Como no podía ser de otra manera comenzamos la cena probrando el Tlaquepaque, una bebida compuesta por tequila blanco, refresco de toronja, jugo de limón y de naranja y sal.


Azulejos y platos decoran las paredes de este cachito de México dentro del Hotel. 

  
  

Como habéis visto la pulsera con todo incluido también es apta para celíacos.

No sólo os recomiendo el hotel por su comida, por la atención del personal, sino que también lo hago por las innumerables actividades que había, desde excursiones, pasando por el Spa (es el plan perfecto para los días de lluvia) y terminando en lo impresionante que es el hotel.

Finalizo los posts de mi luna de miel con mucha pena pero con un pensamiento muy claro, jamás dejéis de viajar por ser celíacos porque cuando menos te lo esperas encuentras hoteles como éste y si no es así el kit de supervivencia siempre nos sacará de un apuro mientras visitamos lugares de ensueño.

y... ¡¡¡¡Viva México!!!!

4 comentarios:

  1. Que maravilla Lorena¡¡¡¡¡ mira, he estado en muchas partes del mundo pero el "Riviera Maya" y caribe en general, es uno de mis "pendientes" así que tomo buena nota para cuando pueda escaparme con mi guapo. Y sin duda, la celiaquía no nos debe parar nunca a la hora de viajar. Un besazo

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    1. Helena el hotel tiene zonas exclusivas para niños con un montón de actividades que a tus peques les encantaría!

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  2. me ha encantado el post Lorena!!
    me encanta que pudieses comer tanbien en la Rivera Maya, me apuntare este melia para ir, si me animo a ir a la Rivera Maya
    gracias por compartir con todos tu luna de miel, asi animas a otros celiacos a no limitarse
    un besote

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  3. La verdad es que te lo recomiendo 100% te encantaría!!!

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