Yo soy de las que piensa que hacer un balance de lo bueno y lo malo a final de año, como decía la canción de Mecano, es algo constructivo e incluso necesario para comenzar el año con nuevos objetivos.
Cuando va a terminar un año repasas el listado de cosas que te propusiste hacer: Estudiar inglés, apuntarte al gimnasio, cocinar más, seguir luchando por tus sueños... En este 2015 el inglés ha dejado de ser mi asignatura pendiente, me apunté al gimnasio, aunque si le preguntáis a Mr GF os dirá "Se compró la ropa, zapatillas y todo lo necesario y sólo fue dos días..." Bueno pero lo importante es que lo hice y que lo puedo tachar de mi lista jaja. Cocinar más sigue en la lista de pendientes, así como seguir luchando por todo lo que me haga feliz y haga feliz a la gente que me rodea. Ya que eso no lo pienso tachar jamás.
Mi 2015 comenzó en Sevilla con un secreto del que sólo éramos participes Mr GF, la empresa de catering José Fernández, Arantxa de Inosolo, los chicos de Media Mandarina, Chloé y yo.